En los años 1980,  Doña Amantina Gutiérrez Pérez; impulsada por la necesidad de encontrar un bizcocho fino y delicado en la Ciudad de Santiago, decide  realizar cursos de repostería tanto en República Dominicana como en Estados Unidos, siendo este momento donde Doña Amantina descubre su pasión por la repostería realizando los primeros bizcochos para amigos cercanos y familiares. Su idea toma fuerza cuando el voz a voz y recomendaciones de su trabajo con el público en general la hizo desarrollar lo que hoy es Amantina Pasteles. 

Desde ese entonces comienza una historia de pasión y entrega por la repostería,  que con la ayuda de su hijo y nietos, han posicionado a Amantina Pasteles como una de las reposterías más reconocidas y prestigiosas de la ciudad de Santiago de los caballeros por mas de 30 años. 

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